Historia
de la Fotocopiadora
La Fotocopiadora, tiene sus orígenes como medio impreso,
desde Gutemberg. Los procesos de duplicación mecánica abrieron el acceso a la
cultura e información, que hasta entonces eran contenidos en manuscritos
manuales. En 1867 la aparición de la máquina de escribir aumentó la posibilidad
de duplicar originales. Antes de la llegada de la copiadora, hacer una
reproducción de un documento requería un gran trabajo basado principalmente en
la fotografía o la mimeografía. Lo común para duplicar un documento era usar
papel carbón (papel de calca o de calcar); pero en 1903, el norteamericano G.
C. Beidler descubrió el modo de hacer la reproducción rápida de un documento
por revelado instantáneo de un negativo fotográfico, técnica que patentó en
1906. Este revelado rápido dio origen a las primeras fotocopias, más parecidas
a una fotografía que a la copia corriente que conocemos hoy, obtenida de la
fotocopiadora.
(Chester Carlson nació el 8 de febrero de 1906 en Seattle (Washington,
USA), sus abuelos maternos y paternos procedían de Suecia. Al poco de nacer, su
familia se mudó a varios lugares de California, Arizona, México y finalmente se
establecieron en San Bernardino (California))
(Chester Carlson inventor y abogado, inventor de la
primera fotocopiadora sacando una copia exitosa en papel el 22 de octubre de 1938 salida a la historia ayudado a
desarrollarla con físico alemán Otto Kornei)
El 22 de octubre de 1938, Chester Carlson, sacó la primera
copia exitosa en papel por medio de un sistema llamado xerografía. Xerografía
deriva del griego xeros = seco y graphos = escritura, que significa escritura o
impresión en seco. La parte seca de este proceso significa que las copiadoras
pueden usar papel común, sin tratamiento especial. La xerografía eliminó el uso
del papel caro especialmente estucado. Mientras investigaba en el Batelle
Memorial Institute, Carlson perfeccionó el sistema del copiado xerográfico y
vendió los derechos comerciales a la compañía Haloid en 1947. En 1950 Haloid
cambió su nombre por Xerox e introdujo la primera copiadora xerográfica
automática a nivel comercial en 1959, sacando la primera copia en 15 segundos y
en 7.5 segundos las siguientes. Así la fotocopiadora se define como uno de los
inventos más notables del siglo XX.
Hoy todas las marcas de copiadoras, utilizan básicamente el
mismo proceso xerográfico, estas máquinas utilizan tinta en polvo, funcionan
aprovechando la electricidad estática y son capaces de imprimir muchas copias
por minuto.
Una nueva generación de copiadoras invade ahora el mercado,
usando tecnología digital, cuyas ventajas más notables son la mayor calidad de
imagen, facilidad de operación, bajo ruido, bajo consumo de energía, menos
mantenimiento técnico y vapor velocidad en procesar las fotocopias. Lo más
atractivo de la generación digital, es que son multifuncionales, prestando
también servicio de impresora, pueden además ser conectadas a un PC. Lo que
conlleva a que existan copiadoras multifuncionales con características tales como:
capacidad de disco duro de 80 GB, impresión con red de lenguaje PCL6, escaneo a
color con Sharpdesk (1 usuario), almacenamiento de documentos en disco duro.
(Carlson tenía claro que el funcionamiento
básico tendría que depender de la reflexión de la luz, es decir, un proceso
fotográfico, conocía el funcionamiento de los revelados fotográficos basados en
haluro de plata y la luz para obtener imágenes, empezando con sus pequeños
experimentos en su apartamento).
Pero, ¿cómo funcionan? Para empezar existen 2 tipos de
fotocopiadoras:
1- Xerográficas (usan papel normal)
Proceso:
El documento original es barrido por un rayo de luz intensa
que proyecta la imagen sobre un tambor giratorio de superficie fotosensible
(este se carga electrostáticamente en correspondencia con la imagen).
Sobre el tambor se distribuye un polvo pigmentado (tóner)
que se adhiere a las zonas electrizadas (donde hay imagen), reproduciendo el
escrito o dibujo original.
La imagen así pigmentada es transferida del tambor al papel
dispuesto en la fotocopiadora, el cual finalmente se calienta para fijar de
modo definitivo el pigmento sobre la copia.
2. Electrostáticas (usan un papel sensible especial)
Proceso:
La imagen a reproducir se proyecta directamente sobre el
papel, cuya superficie queda sensibilizada con cargas eléctricas.
El papel se somete luego a un baño de tóner y las partículas
se fijan en las zonas electrizadas de éste dando lugar a la copia definitiva.
Datos curiosos. El paso siguiente fue la fotocopia en color,
procedimiento creado por la empresa japonesa Cannon, en 1973. La misma empresa
logra el fotocopiador láser en blanco y negro y posteriormente, en 1986,
presenta la primera fotocopiadora láser color sobre papel común. Entre las
marcas más importantes de copiadoras además de Cannon contamos también con
otras como Xerox, Sharp, Ricoh, Samsung, Konica, Minolta y Toshiba.
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